sábado, 28 de noviembre de 2009

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un año
tresciento sesenta y cinco días
treinta y un millones quinientos treinta y seis mil segundos.
Pasado el año, se revivie el daño, y mientras tanto dimos una vuelta al sol.

5 comentarios:

  1. Cuando vuelas entre tus sueños,
    cuando gateas como una niña en busca de tus deseos, o te escondes en lugares singuares, no llevas contigo una sonrisa?


    Solo salvas de 365 días, una herida mal cerrada?

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  2. De ese año salvo cada segundo, menos quizás los primeros porque mi alma murió un poco. Pero del resto de los segundo, de los minutos, el resto de ese año lo salvo todo, pues es cuando descubrí que en cualquier instante, en cualquier momento podemos dejar de vivir, podemos desaparecer para siempre y sumirnos en una profunda oscuridad que todo el mundo desconoce.

    Hace un año abrí los ojos más que nunca, abrí mi bolsa de deseos, abrí mi risa al mundo.
    Hace un año, comencé a vivir como si todo fuera a terminar en cualquier momento. Desde hace un año vivo sumida en una profunda locura, que adoro y de la cual no quiero separarme nunca.

    La locura de vivir.

    (hay heridas que no se cierran, porque algunos no queremos que cierren nunca, dicen que el olvido trae de la mano la muerte, prefiero resistir y pensar, que mientras recordemos estaran vivos, 365 dias de resistencia y toda una vida para mantenerla)

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  3. Entonces no son heridas...

    Son conversaciones con quienes no sabemos donde estan, a quienes colocamos en sus labios, respuestas que sabemos que dirían.

    Ellos no quedrian ser una herida, preferirían ser una respuesta con carcajada. Su típica sonrisa.

    De los malos momentos se aprende a vivir.
    De los buenos se vive.

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  4. Pero en parte, son heridas ¿¿no crees??, son heridas porque pasó algo que duele, son heridas porque pese a pasar tiempo y distancia hay una cicatriz, porque son heridas cicatrizadas que nos recuerdan a cada momento que pasó algo que nos hizo daño y que nos sigue doliendo. Son heridas de ausencia, de alguien que no vovera. Ellos seran carcajadas, como tu dices, resan respuestas que tal vez ellos dirian, seran una enseñanza más en la vida. Pero su ausencia, siempre sera un herida, y mientras duela hará que su presencia este más cerca de nosotros. Por otro lado te digo, que me han gustado mucho tus dos ultimas frases; DE los malos momentos se aprende a vivir, De los buenos se vive.

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  5. No nos entendemos, esto es una conversación infinita de esas con cerveza, te o un helado de fresa y chocolate.

    Entiendo que el recuerdo mantiene vivo a las personas que están lejos.

    Pero no entiendo por que le aprietas con el dedo a las heridas para que sangren, por que conviertes las cicatrices en heridas, y por que te empeñas en creer que para recordar y mantener vivo, es preciso ir de luto.

    Es más, creo que esas heridas no dejan sacar toda tu locura, aunque sea un poquito te anclan al pasado, que no es lo mismo que al recuerdo...

    ¿Puede que vivas en el pasado, engañándote con tu locura? Pregunto...

    Yo he vivido en el presente, engañándome con los sueños, después viví en el presente engañándome con mi locura, ahora vuelvo a soñar con el futuro mirándome al espejo.

    Sabiendo que no existe más que este preciso momento. Todo lo demás es imaginación por el pasado y por el futuro.

    A veces pienso que tanta filosofía de la vida me va matar, otras creo que los que pasan frió en su cabeza por que no se hacen preguntas, son zombis u ovejitas...

    A esos les daba yo helado de fresa y chocolate, con una pregunta por encima de caramelo...

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